Los diferentes tipos de visas adecuadas para estudiar en Francia
¿Es obligatorio el visado en mi caso?
Dependiendo de su país de origen, la obtención de un visado puede ser necesaria si planea estudiar y/o aprender francés mientras reside en Francia. Sin embargo, los ciudadanos de la Unión Europea, Suiza y los nacionales del Espacio Económico Europeo pueden residir y/o estudiar en Francia sin necesidad de solicitar un visado previamente.
En cuanto a los nacionales de otros países que no tengan un permiso de residencia francés, la obtención de un visado sigue siendo imprescindible para residir en Francia con fines de estudio o aprendizaje del idioma francés, ya sea con fines académicos o personales. La naturaleza del visado requerido depende entonces de su condición de estudiante o no, y también está condicionada por la duración de su estancia en Francia.
Visado de larga estancia: lo ideal para estudiar en Francia
El visado de larga estancia es particularmente adecuado para los estudiantes que desean aprender francés, ya que puede prorrogarse en el marco de estudios superiores en Francia. Con una validez de 4 a 12 meses, este visado exime de la obligación de solicitar una tarjeta de residencia y conlleva varias ventajas: el titular puede viajar libremente por el espacio Schengen, ejercer una actividad profesional a tiempo parcial en Francia y beneficiarse de ayudas a la vivienda proporcionadas por la CAF (Caisse des Allocations Familiales). Sin embargo, los titulares de este visado que deseen prolongar su estancia más allá de su período de validez deben iniciar el trámite para obtener una tarjeta de residencia en la prefectura, dos meses antes de la fecha de vencimiento del visado.
Además, el visado de larga estancia, como permiso de residencia, también está destinado a trabajadores, becarios y visitantes, ofreciendo una duración flexible de 4 a 12 meses durante la cual pueden aprender francés en Francia.
Visado temporal de larga estancia
Este visado temporal, con una duración de cuatro a doce meses, se distingue del visado de larga estancia por varias características esenciales: no está sujeto a prórroga en Francia y no confiere al titular la posibilidad de trabajar a tiempo parcial ni de solicitar ayuda económica de la CAF. Por lo tanto, es adecuado para las personas que planean una pausa de unos meses o incluso un año sabático con el fin de aprender francés.
Visado de vacaciones y trabajo o «joven viajero»: cultura y turismo
Destinado a personas de entre 18 y 30 años y aplicable a 16 países, el visado de vacaciones y trabajo o «joven viajero» se concede en el marco de una iniciativa turística y cultural en Francia, que incluye el aprendizaje del idioma francés. Limitado a una duración máxima de un año, este visado no puede prorrogarse, pero sí permite el ejercicio de una actividad remunerada.
